lunes, 30 de abril de 2018

Gracioso chiste entre un médico y un arriero

Grabado que encabeza el pliego editado en Barcelona por J. Tauló en 1857
Este pliego narra la obsesión que tiene el médico por Juanita, esposa de Juan el arriero. Primero trata de comprar su voluntad adquiriendo un coche que Juanita heredó de su tía. Tampoco consigue comprar su huerto, de evidente simbología sexual. Finalmente, ofrece una importante suma de dinero a Juanita para que "le otorgue lo que ella sabe".

Juanita, con la aquiescencia de su marido el arriero, (donde subyace implícitamente el diferente "status" entre una persona valorada socialmente y rica frente a un oficio modesto, "pero honrado"), urden un plan para castigar las pretensiones del doctor.  Aprovechando que el arriero anuncia que se ausentará una semana, el doctor aprovecha para visitar a Juanita. Según lo pactado previamente, el arriero se presenta súbitamente y la dama esconde al doctor en un arca llena de harina. De esta forma, y tras propinar una soberana paliza al pretendiente, se vengan del mismo.

El castigo y escarmiento a los pretendientes cortejadores, sean estos curas, sacristanes , monaguillos, zapateros o, como en este caso, se trate de un médico, es un recurrente y clásico argumento cuentístico conocido con el  título de Los pretendientes atrapados, que, según el conocido índice de Aarne y Thompson, corresponde al Tipo 1730: [Antti Aarne y Stith Thompson, The Types of the Folktale, Helsinki: Academia Scientiarum Fennica, FF Communications, n.º 184, 1961]. 

A este mismo cuento, en su versión de pliego de cordel, le dediqué una anterior entrada que puede consultarse a través del siguiente enlace:


El pliego, editado en Barcelona por la imprenta de F. Vallés, sin fecha,  añade al final unos relamidos "trobos nuevos".





©Antonio Lorenzo

lunes, 23 de abril de 2018

Sentidas quejas de un fino amante a su dama y su respuesta


Sentidas quejas expresadas en quintillas por un fino amante y dirigidas a su dama, de la que se siente despreciado. Se añade la respuesta de la dama aconsejando a su amante paciencia y constancia, ya que las circunstancias, que no se explicitan, impiden su ansiado encuentro.

Concepción idealizada, platónica y mística del amor, que recuerda al concepto literario del Amor cortés, donde la amada aparece siempre distante y centrando su dicha en el propio sufrimiento amoroso, en la doliente espera y en el respeto a su honor.

Reproduzco dos pliegos del mismo asunto editados por diferentes imprentas. El primero de ellos está editado en Madrid por la Imprenta de José María Marés en 1842.





El segundo pliego está editado en Barcelona por la Imprenta de Francisco Vallés, sin fecha.





©Antonio Lorenzo

lunes, 16 de abril de 2018

Consejos higiénicos para que las madres cuiden a sus hijos (La Gota de Leche)


Traigo en esta ocasión un curioso folleto donde se recogen una serie de consejos para la correcta cría de los hijos. Las diferencias entre un folleto y un pliego de cordel se solapan en muchas ocasiones. En general, se entiende por folleto un impreso con un número de páginas más elevadas que las ofrecidas en los pliegos y generalmente encuadernados rústicamente. A su vez, el folleto suele presentar una singularidad temática o de autoría. El pliego de cordel, en cambio, se encuentra por lo general a medio camino entre el folleto y la hoja suelta, siendo su naturaleza híbrida, en cuanto admite tanto lo iconográfico, lo textual y lo oral, y que, ya sea de forma individual o colectiva, actúa como soporte o portador de un acto comunicativo.

Pero al margen de estas someras y ambiguas distinciones, lo que nos interesa en esta ocasión es la reproducción de un folleto donde se recogen pautas y consejos de comportamiento que han de tener en cuenta las madres. 

Aparte de los consejos y las ilustraciones que acompañan al folleto, con unas maduras madres tocadas con una larga y oscura vestimenta, resulta de interés comentar algo sobre la llamada Gota de Leche.

Jean Geoffroy (1853-1924) - Tríptico de "La Goutte de lait"
El origen de la Gota de Leche o consultorios para niños de pecho, se remonta al siglo XIX en Francia, donde en la última década del siglo XIX se crearon una serie de consultas o escuelas para enseñar a las madres cómo cuidar de sus hijos. En ellas se atendían a las madres que no podían amamantar a sus hijos ofreciéndoles como alternativa la lactancia artificial y desarrollando diversos procedimientos de "maternalización" de la leche. La primera consulta, abierta en París en 1892, fue creada por Pierre Budin, donde se pesaba y examinaba a los lactantes semanalmente y se ofrecían consejos a las madres lactantes sobre la alimentación e higiene de sus hijos.

En España, la llegada del primer Consultorio de niños de Pecho y Gota de Leche se le debe a  Rafael Ulecia y Cardona (1850-1912), quien lo abrió en Madrid en 1904 en una época donde la mortalidad infantil era muy elevada por cuestiones de insalubridad, hacinamiento y malos usos. Según recogen algunos estudios de finales del siglo XIX, uno de cada cinco nacidos no llegaba al primer año de vida y dos de cada cinco no sobrepasaban los cinco años. La idea se extendió rápidamente creándose nuevos consultorios de la "Gota de Leche" en Sevilla (1906), Bilbao (1906), Málaga (1906), Valladolid (1911), Granada (1916), Córdoba (1916), Melilla (1915), Salamanca (1919), etc.


Consultorio en Madrid, año 1904
La "Gota de Leche" contó en algunos casos, como en Santander, con el apoyo institucional de la reina Victoria Eugenia de Battemberg, esposa de Alfonso XIII.


Las "Gotas  de  Leche"  se  desarrollaron  y persistieron  durante el reinado  de  Alfonso XIII,  pasando por la  dictadura  de  Primo  de Rivera, la II República, la Guerra Civil y el Régimen de Franco, hasta aproximadamente mediados del siglo XX, donde se fueron transformando poco a poco en Institutos de Puericultura o Áreas de Maternidad.


El introductor en Madrid del Consultorio para niños de pecho, Rafael Ulecia, publicó una cartilla para la crianza de los hijos, de la que se editaron miles de ejemplares, destinada a ofrecer consejos para el correcto trato de los lactantes. De igual forma, el doctor Carlos Carazo publicó posteriormente otro folleto con consejos higiénicos para madres lactantes, que es el que se reproduce en su totalidad.



Cómo debe tenerse en los brazos a los niños

Posición del niño para mamar

Manera de sostener al niño para dormirle

Cómo debe meterse en el baño

Manera de ponerle en el peso

Forma de darle el biberón

©Antonio Lorenzo