sábado, 11 de abril de 2015

Pascuala la criminal


De la imprenta barcelonesa de Ignacio Estivill, al que dediqué una entrada sobre su actividad impresora que puede consultarse a través de este enlace:


traigo otro ejemplo de crímenes horrorosos, tan frecuentes en este tipo de producciones, con una ilustración impactante y fechado en 1852.






Antonio Lorenzo

martes, 7 de abril de 2015

Trágicos azares que ocasionan las mujeres a sus maridos por ser amigas de bromas y licores


Siguiendo con los característicos prejuicios tan arraigados contra las mujeres en un gran número de pliegos de cordel, reproduzco el editado en Murcia por Pedro Belda, quien trabajó durante aproximadamente tres años para la imprenta de los Herederos de Teruel antes de establecerse por su cuenta en 1857.





©Antonio Lorenzo

viernes, 3 de abril de 2015

La pasión de Cristo explicada por las piezas del arado

Arado romano y otros utensilios de labranza
La historia del arado va ligada a la cultura de numerosos pueblos. Hay arados de diferentes clases y con variantes más o menos significativas según las diferentes zonas geográficas.

Según las grandes zonas de distribución se distinguen tres tipos de arados: los cuadrangulares o rectangulares, los arados dentales y los arados ‘cama’ o castellanos con reja de forma lanceolada. Este último es el llamado 'arado romano', conocido con esta denominación en muchas zonas rurales, siendo el modelo de apero de labranza más extendido.

La denominación de las distintas partes del arado no difieren sustancialmente entre unas zonas y otras, si bien José Manuel Fraile Gil en su sucinto pero documentado trabajo sobre el arado (Revista de Folklore, Nº 9, 1981) nos facilita la siguiente descripción:

"El esquema base de un arado romano, generalizando, sería el siguiente: una reja 1) de hierro piramidal o cónica que se hunde en la tierra y la remueve; va unida al dental 2), pieza de madera y sustento de todas las demás, ésta va atravesada por las orejeras 3), que son dos piezas de madera transversales al dental y que tienen como misión abrir el surco. Al dental se fija la esteva 4), que es la pieza que se empuña para ir llevando el arado, su extremidad o enmangue es la mancera 5), si bien en algunas zonas se confunden los términos de mancera y esteva, usándose tan sólo uno de los dos para la totalidad de la pieza; la reja y la esteva se ajustan al dental por medio del pescuño 6), que es una cuña de madera que se ajusta con unos golpes cada vez que se compone el arado; estos golpes se dan con la azuela. La unión entre el dental y la parte del tiro se hace por medio de la cama 7), que se enlaza con el timón por medio de unas abrazaderas llamadas vilortas 8). El timón 9) es un largo palo de madera al que se fija la tracción animal por medio de los clavijeros 10) por uno de los cuales se atraviesa un pasador llamado barreno 11), esta unión al tiro animal se realiza también por medio de un anillo, llamado barzón, por el que se pasa el timón por el yugo. La telera 12), es una barra de hierro que refuerza la unión entre la cama y el dental; ésta se ajusta sobre la cama por otra pieza metálica llamada chaveta 13)".




El resto de las piezas que se nombran en la canción, salvo el trechero, que es otra pieza metálica que se introduce entre el dental y la cama, aluden al tiro animal o a los accesorios que rodean la operación de la arada.

También se alude al gañán que guía los bueyes por medio de la ijada, que es una vara rematada con un pincho, a las toparras, el botijón, el surco y la semilla.

El canto del arado no tiene una ocasionalidad fija ya que puede ser cantado como ronda, canto propio de Cuaresma o cantado incluso en época navideña.

El pliego que reproduzco está editado en Madrid, sin año, por la Imprenta Universal, que estuvo situada en la calle del Oso. Incluye al final la canción Los sacramentos cantados, recogida oralmente en numerosas localidades en épocas recientes. 






Antonio Lorenzo

domingo, 29 de marzo de 2015

Domingo de Ramos: entrada de Jesús en Jerusalén

Grabado de Hans Collaert (ca. 1530-1580)
El Domingo de Ramos conmemora el hecho de la entrada de Jesús de Nazaret en Jerusalén junto a una multitud que le aclamaba como el Mesías, tal y como recogen los evangelios canónicos antes de su pasión, muerte y resurrección, conmemoración que da inicio a la Semana Santa.

La bendición de las palmas y las ramas de olivos, como símbolos de alegría y victoria, se colocan posteriormente tras la puerta de entrada de la casa a modo de protección formando parte de las costumbres y celebraciones litúrgicas de este día en numerosas localidades, a las que suelen acompañar canciones alusivas, como las recogidas por el folklorista alemán y nacionalizado estadounidense Kurt Schindler en su magna obra Folk Music and Poetry of Spain and Portugal (1941), fruto de su recopilación folklórica por tierras españolas y portuguesas entre 1929 y 1932. En dicha obra se recogen muestras significativas de las canciones interpretadas en el Domingo de Ramos, de las que extraigo unos ejemplos.

























El pliego que reproduzco está editado en Barcelona en 1880 por la imprenta Peninsular y a la venta en la tienda de los Sucesores del impresor Antonio Bosch.





Antonio Lorenzo

viernes, 20 de marzo de 2015

La gitanilla de Madrid

Músicos ambulantes ilustrados por Doré
Otro de los pliegos derivados del teatro es el que se refiere a la gitanilla de Madrid. Si bien la fuente primera es una de las famosas Novelas ejemplares de Cervantes (publicadas en Madrid en 1613), ésta fue inspiradora e imitada por autores como Antonio de Solís o Gabriel Estrella.

Antonio de Solís y Rivadeneira (1610-1686), eclesiástico y político español, autor también de la Historia de la conquista de México (1684), se inspiró en la obra de Cervantes para construir su comedia La gitanilla de Madrid en 1632, si bien se conocen dos versiones parecidas atribuidas una de ellas a Juan Pérez de Montalbán en una edición suelta, aunque parece ser que esta última no es sino una auto-refundición o reelaboración del mismo título retocada y adaptada por el propio Antonio de Solís, compuesta en primera redacción en 1632 y que fue representada en 1657 en El Buen Retiro con motivo del cumpleaños del rey Felipe IV.

 Estas atribuciones erróneas eran frecuentes en el Siglo de Oro debido al trasiego de copias sueltas que circulaban entre las compañías de teatro y que incorporaban y/o modificaban los textos para adaptarlos a sus representaciones.


La obra del mismo título de Gabriel Estrella es menos problemática, ya que él mismo acepta su deuda y admiración por la obra cervantina.




Sobre el pueblo gitano se han proyectado imágenes y atribuciones que no siempre responden a la realidad. Debido a la histórica falta de confianza sobre el gitano se han ido desarrollando un conjunto de tópicos y prejuicios, como atribuirles fama de ladrones, robos de bestias o secuestro de niños para su explotación, que es el caso central que nos sugiere tanto la novela cervantina como los pliegos. Esta creencia sobre el robo de niños se traduce en frases tan extendidas como aquella de: «Si no te portas bien, vendrán los gitanos y te llevarán».

Bien es cierto que el propio Cervantes trata de suavizar algo estas creencias desde la primera página de su novela, donde escribe:

Parece que los gitanos y gitanas solamente nacieron en el mundo para ser ladrones: nacen de padres ladrones, críanse con ladrones, estudian para ladrones y, finalmente, salen con ser ladrones corrientes y molientes a todo ruedo; y la gana del hurtar y el hurtar son en ellos como accidentes inseparables, que no se quitan sino con la muerte.
Una, pues, desta nación, gitana vieja, que podía ser jubilada en la ciencia de Caco, crió una muchacha en nombre de nieta suya, a quien puso nombre Preciosa, y a quien enseñó todas sus gitanerías y modos de embelecos y trazas de hurtar […] Salió Preciosa rica de villancicos, de coplas, seguidillas y zarabandas, y de otros versos, especialmente de romances, que los cantaba con especial donaire.

Antes de dar paso al pliego completo reproduzco otras portadas sobre el mismo asunto por diferentes impresores.

Sin lugar de edición y sin año

Sevilla, Viuda de Vázquez y Cía, 1816
Valencia, imprenta de Laborda, sin año

























El pliego completo, dividido en dos partes, carece de lugar de impresión y de fecha. Es curioso notar como el que se declara autor del mismo, un tal Vicente Benavente, guarda un estrecho parentesco temático con la obra de Solís y Rivadeneira, pues tanto los pliegos como la comedia conservan el mismo título, a lo que se une el supuesto conocimiento del autor del pliego respecto a algunos de sus personajes tanto de la obra de Cervantes como la de Solís.









Antonio Lorenzo

domingo, 15 de marzo de 2015

Seguidillas donde el enamorado pinta la hermosura de su dama

Grabado ochocentista alusivo al mes de mayo
El mes de mayo se ha considerado desde siempre como un tiempo de renovación de la vida y de los campos tras el letargo invernal. Las fiestas que se celebran en numerosas localidades el día primero de mayo tienen un claro origen pre-cristiano asociado a un rico simbolismo (el árbol de mayo, la 'maya', las virtudes mágicas asociadas al 'agua de mayo', la Cruz de Mayo, la bendición de los campos, las enramadas, las rogativas, etc.).

Entre las manifestaciones simbólicas más conocidas se encuentran, entre otras muchas, la elección de la 'maya' (muchacha ricamente ataviada que se entroniza a las puertas de las casas a modo de altar), los emparejamientos o casamientos fingidos entre mozos y mozas o las rondas de los 'mayos' que recorren las calles la noche del treinta de abril.

Ejemplo inédito de estas canciones de mayo es el recogido en el pueblo de El Atazar en la provincia de Madrid.

Versión de El Atazar (Madrid), cantada por Isabelo Martín, de 71 años. Recogida el 10 de abril de 1983 por A. Lorenzo, P. Esteban y A. Duro.

               Mayo florido y hermoso    a estas puertas me has traído;
               para echarte un lindo mayo,    señores, licencia pido.
               Y esa licencia, galanes,    siempre la llevo conmigo:
               de echar mayo a quién quisiera,    no echándome a mí en olvido.
               ¿Quién vive en ese aposento,    que llamo y no me responde?
               Vive la sal del lugar,    ‘Fulana’ tiene por nombre.
               ¿Qué mayo la echaré yo    que la enrame y corte flores?
               Allá se queda 'Fulano',    que muere por tus amores.
               Y ella dice que le quiere,    y él dice que le ha de amar
               con el amor verdadero    que jamás se han de olvidar.
               Si acaso quedas dudosa,  o bien no lo has entendido,
               'Fulano' se llama el mozo,    y 'Fulanez' de apellido.
               Con esto ya quedarás    más contentilla y alegre
               que el rey con sus alcabalas    y en mundo con tanto tiene.
               Ya hemos hecho una boda,    sin cura y sin sacristán,
               para todo mayo y junio,    y luego Dios dispondrá.

Más conocido como canto de mayo en muchas localidades es el 'retrato de la dama', canción seriada o enumerativa donde se glosan las partes del cuerpo de la muchacha de la cabeza a los pies con metáforas que, por lo general, suelen resultar tópicas y manidas.

Existen también canciones del retrato ‘a lo divino’ asociadas a la Virgen e incluso a la Cruz.

Estos cantos no son exclusivos de la península, pues se conocen versiones italianas y también sefardíes, usadas en el norte de Marruecos como cantos epitalámicos.

El pliego que reproduzco procede del siglo XVIII, pues sabemos que su impresor, Andrés de Sotos, con oficina en Madrid, editó entre 1764 y 1792. Las analogías con la canción del retrato de la dama si las comparamos con los numerosos textos recogidos por tradición oral son evidentes. Otro ejemplo más de la intrínseca relación entre los pliegos de cordel y la tradición oral en su conjunto.






Antonio Lorenzo

miércoles, 11 de marzo de 2015

El valiente Juan García Nebrón


De la prolífica imprenta cordobesa editora de pliegos de don Rafael García Rodríguez, de la que tengo pendiente dedicar una entrada exclusiva, reproduzco este pliego, sin año, donde se nos narran las aventuras y fechorías del bravo Juan García Nebrón, nacido en la malagueña localidad de Cañete la Real. Traficante de tabaco y de sedas se va deshaciendo de todo aquel que se le pone por delante hasta que finalmente cae preso. Ya en la cárcel da cuenta de todas las muertes anteriores de las que ha sido ejecutor y gracias a la intercesión de dos ilustres hermanas marquesas logra que se le conmute la pena de muerte por la de cadena perpetua. 











Antonio Lorenzo