Del año 1876 y de la imprenta madrileña de la calle Juanelo, este pliego de aleluyas donde se cuenta la azarosa vida del bandido Becerra con los ingredientes propios del género.
Primera parte de 'El corazón de un bandido' |
Para mantener a su amada, Pedro Becerra de vio obligado a hacerse bandolero. El pliego incide en su generosidad y en el amor a su hija, siendo rescatado de la ejecución por sus compañeros bandidos. El pliego se hace eco de la infidelidad de su amada Margarita y de cómo el padre de ella llevó a su nieta a la inclusa para no mancillar el honor familiar. Margarita se promete con un marqués, pero al fin se reconcilia con el bandolero en presencia de Clara, la hija de ambos. También aparece un ermitaño que bendice a los bandidos por salvar a su capitán que iba a ser ejecutado y perdona a su antiguo rival el marqués.
Segunda parte de 'El corazón de un bandido' |
La aleluya es deudora de la obra de Ramón Franquelo Martínez (Málaga, 1821-1875), autor de un drama en dos partes y en verso bajo el título de 'Pedro Becerra o el corazón de un bandido', estrenada en Madrid en 1854. Este Pedro Becerra aparece como uno de los célebres bandidos conocidos como los 'Niños de Écija', inspiradores de leyendas y de un celebrado pasillo andaluz.
Ilustración que acompaña la obra de Franquelo |
Conocemos la misma aleluya, según consta en los diferentes pies de imprenta, reeditada por la imprentas de Marés, Minuesa y Hernando en Madrid y que responden al mismo tema.
Divido la aleluya en dos secciones y la reproduzco completa al final.
Antonio Lorenzo